Niño símbolo de la Teletón fue operado exitosamente

Tras el rotundo éxito que alcanzó la última Teletón, al recaudar más de S/. 10 millones de soles, el niño símbolo de la Teletón, Dilver Delgado Fernández, de tan solo siete años fue operado con éxito.
EL pequeño nació con una dolorosa malformación en la columna vertebral, y fue finalmente operado gracias a la solidaridad de la empresa privada.
Durante la Teletón de diciembre pasado, el pueblo peruano se unió con el objetivo de ayudar al Hogar Clínica San Juan de Dios. Uno de los niños que representaron a esta campaña solidaria fue Dilver Delgado Fernández, un menor de siete años que nació con una dolorosa malformación en la columna vertebral.
Conmovidos por la dolencia del niño, tres empresas privadas –Leonisa, Synthes y la clínica Ricardo Palma– se comprometieron a cubrir el costo de la operación necesaria. Ésta se realizó hace una semana, con tal éxito que al pequeño Dilver le dieron de alta.
Hace siete años, cuando Dilver nació en un caserío del distrito de Huabal, provincia de Jaén, Cajamarca, su madre, Teodolinda Fernández Castro, percibió que no estaba sano. Sin embargo, en la posta le decían que el problema del niño era la desnutrición.
El menor creció, pero con serios problemas para caminar. Su columna vertebral no estaba lo recta que debería, lo que le afectaba desde la forma de desplazarse hasta la respiración. Sin embargo, los médicos de la zona veían en él un problema más que una falta de buena alimentación.
Hasta que los padres decidieron ver su dolencia con especialistas, por lo que terminaron recalando en la clínica San Juan de Dios hace dos años.
Sin embargo, su mal no le ha impedido desarrollarse como un niño más. Su madre menciona que es el primero de sus cuatro hijos que se ofrece a hacer los mandados. Recuerda, por ejemplo, que a Dilver le gusta cargar leña y hacer otras labores en la chacra que tienen en el campo cajamarquino. “Hasta imitaba a su papá poniéndose su machete al cinto”, agrega la señoraFernández.
Tras su operación, familiares, amigos y los pequeños pacientes y personal del Hogar Clínica San Juan de Dios recibieron a Dilver, quien retornó a este nosocomio, en un ambiente de algarabía.
En compañía de su madre, salió de alta, con alegría, de la clínica Ricardo Palma. Recibió globos y algunos obsequios del personal de esta institución, que lo despidió y auguró bastante mejoría.

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